jueves, 20 de diciembre de 2012

"Vida misma"

Traba el espacio disuelto, sucumbe,
cocinados los dedos, encrespada la risa,
trémulos espasmos hacen vivir el corazón,
nubes, nubes y silencio,
cabizbajos deseos, que ya se van.
Saltos de tiempo a momentos gratos,
saltos a abismos que no existen más,
el sol se aleja, se burla,
el momento en la historia de la espera no cambia,
sigue allí, esperando.
El sol viene y no lo quiero esperar,
viene en camino gritan las voces,
viene y no está, ha perdido,
ha errado el rumbo volador,
ha equivocado las estancias y deshecho en los días,
se ha ido y no ha de volver.
Los ánimos rotos a la espera del primer ataque.
Convierte el dilema en nada,
convierte la risa en nada, convierte la nada en todo
y que este tremendo gemido que guarda mi alma sea nada,
que este impaciente indecente caiga,
se ahorque o envenene,
que este demonio agrio interrumpa el colapso,
y sea nada, sea nada y nada el cielo.
Que las palabras nacidas de mi no lleguen a nadie,
que mis palabras sean nada, la nada que soy,
la desesperación guardada, la soledad encogida, 
tronando las paredes del ser, buscando el escape,
no puede, no soporta, la presión la ahoga
y la soledad más sola está.
Corrige la línea con la desaparición,
derrite la vida, cierra los pulmones,
arranca mis ojos y déjame ir.
Asesina el andar, corta de las venas la felicidad,
germina en abismo la poca bondad,
germínala y déjala morir.

miércoles, 19 de diciembre de 2012

"Cómo"

Cómo hacer saltar el tiempo,
cómo componer lo irreparable,
cómo velar un llanto acabado,
cómo soñar días germinados, borrar lo ingrato.
Cómo acabar el augurio gris,
cómo disipar las nubes oscuras,
cómo difamar la arrepentida del alma,
cómo destruir la mala encima.
Cómo cabalgar sin piernas ni espasmos,
cómo dibujar el persistente voráz,
cómo tomar el ser y verlo reír,
cómo tirar espejos y pedir perdón.
Cómo incorporar la brisa sonriente,
cómo empañar el daño a ti,
cómo sucumbir ante el dédalo interno,
cómo matar el hambre y no el amor.
Cómo romper un destino tirado al azar,
cómo quebrar lo trágico de un dilema inerte,
cómo vencer la yaga que se roe al andar,
cómo sobrevivir días en esta página oscilante.
Cómo respirar las horas sin verte tan bella,
cómo llevar la pena encomendada a tus ojos,,
cómo yacer en trance y no morir de espanto,
cómo persistir al tiempo para amarte más,
cómo ser etéreo al aire y soñar con tus besos,
cómo librarme del mundo,
para ser siempre preso,
preso de ti.



Breves y sinceras palabras para la mujer que me quita el sueño y me lo regala a diario. Te amo Marité, mi linda esposa. Y a nuestro hijo como nunca.